Diario de nuestro viaje a Centroeuropa

De Karlovy Vary a Praga

DÍA 6.- Jueves 29-06-06

Amanece un buen día, nos hemos levantado a las 7:30, pues queremos ver la ciudad antes de ir a Praga.

Desayunamos y salimos, el lugar no nos decepciona, es precioso y se ve la riqueza de antaño en los hoteles-balnearios y en las casas tan señoriales que hay. Lo primero que vamos a ver es la impresionante iglesia ortodoxa (Kostel sv. Petra a Paula) de 1897, luego la Mlýnská kolonáda (Columnata del Molino), de estilo neorrenacentista y que parece un mercado griego, el agua de las fuentes que hay por allí sale a 60º,

la gente bebe el agua con unas jarritas de cerámica que parecen teteras, cuando beben parece que están practicando un ritual, mientras lo vemos se instala una orquesta, así que decidimos quedarnos a escucharlos un rato. Seguimos viendo la ciudad.

Salimos hacia Praga y cuando llegamos, lo primero buscar el hotel Malastrana, ya reservado de antemano por Internet, en el barrio del mismo nombre. Está bastante céntrico y muy bien, además tenemos una parada del tranvía a 2 minutos andando. Después de instalarnos nos vamos a ver la ciudad, pero tenemos que coger paraguas, no vemos muy claro que no llueva.

Praga es divina, las vistas desde los puentes son impresionantes, así, que al ataque, no se pude perder tiempo. Sobre las 8 se cumplen nuestros pensamientos y nos cae una tormenta, a pesar de los paraguas, nos refugiamos debajo del puente Karlov, en el último ojo, de la Ciudad Pequeña, que es una calle, ahí conocimos a Guillaume y su madre (unos franceses, una historia especial, si algún día por casualidad leéis esta página, os mandamos recuerdos).

Al final en vista que no para de llover nos vamos a cenar a un restaurante muy cerca y de ahí al hotel, pues estamos cansados y el tiempo no nos acompaña.